En la 𝐩𝐫𝐢𝐦𝐞𝐫𝐚 𝐟𝐞𝐫𝐢𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐥𝐢𝐛𝐫𝐨 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐜𝐚𝐬𝐢𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐍𝐨𝐯𝐞𝐥𝐝𝐚, el taller de scrapbook resplandecía con colores, texturas y creatividad. Entre las páginas decoradas y los recortes cuidadosamente seleccionados, se encontraba una poderosa razón para preservar recuerdos: 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐚𝐫 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚𝐬.
Las fotos capturan momentos que de otra manera podrían desvanecerse en la memoria, mientras que las letras de canciones añaden un toque emocional, transportándonos a momentos específicos en el tiempo.
En este taller, se celebraba la importancia de guardar estos tesoros, no solo como objetos materiales, sino como vínculos con nuestra identidad y nuestras experiencias compartidas.
Gracias Ana Lopez (paperetsbyana y escrapyarte) por desplegar las alas de la creatividad en un día tan especial.
